Mientras realizaba un vuelo comercial sobre el este de Rusia, el piloto Lou Boyer captó imágenes impresionantes de unas “estelas de condensación”, procedentes de los motores de un avión Boeing 787 Dreamliner.
Recordemos que este fenómeno, también llamado ‘estela de vapor’, se produce cuando “hay presión baja a gran altitud”. A pesar de su apariencia, estos no ocasionan ningún tipo de polución o contaminación eólica.
En este contexto, el piloto quedó tan maravillado con este escenario que decidió grabarlo y subirlo a las redes sociales. “Como un monstruo caído desde el cielo”, escribió, maravillado, el aviador en su perfil de Facebook.