El contagio de más de un centenar de “lobos marinos de un pelo” con gripe aviar a partir del contacto con aves migratorias infectadas generó alertas en autoridades y especialistas que advierten que “el riesgo de transmisión a humanos es bajo”, aunque señalaron que “nunca antes se vio” una afectación de esta magnitud a esa especie al tratarse de una variante del virus “altamente patógena”.
Se trata de los primeros casos registrados en Argentina en los que la gripe aviar se traslada de las aves a mamíferos, en particular a lobos marinos de un pelo (Otaria flavescens).
Desde mediados de agosto, más de un centenar de ejemplares fueron encontrados muertos en Tierra del Fuego, Santa Cruz, Chubut (Península Valdés), Río Negro y en las localidades bonaerenses de Mar del Plata, Necochea, Monte Hermoso, Villa Gesell, Coronel Rosales y se investigan más casos en Villarino.
“Estamos ante una cepa muy agresiva, los animales se contagian rápidamente unos de otros y comienzan enseguida con los primeros síntomas, que son mayormente temblequeos que pueden pasar a convulsiones”, explicó el presidente de la Fundación Fauna Argentina, Juan Lorenzani.
“Llevo muchos años trabajando con lobos marinos y nunca vi algo como esto. Da mucha lástima porque no se los puede aislar ni vacunar. Estamos ante un nuevo hecho de la naturaleza del que lamentablemente sólo queda aprender“, agregó en diálogo con Télam.
El especialista explicó que la presencia de gripe aviar en lobos marinos comenzó en febrero pasado en Perú y Chile, donde debieron emitir “una alerta sanitaria” por la gran cantidad de lobos marinos infectados.
Juan Lorenzani, presidente de la Fundación Argentina, explicó que la gripe aviar en lobos marinos comenzó en febrero pasado en Perú y Chile, donde debieron emitir “una alerta sanitaria” por la gran cantidad de infectados
En esta especie de mamíferos, que “carece de las defensas suficientes para este tipo de enfermedad”, el virus genera graves afectaciones musculares, neurológicas y respiratorias, que se advierten en “los movimientos convulsivos y desorientados que se registran en los ejemplares infectados”, detalló Lorenzani.
El virus A en su variante H5N1 presente en los lobos marinos es un subtipo de gripe aviar altamente patógeno, que registró sus primeros registros en Sudamérica en aves silvestres a fines de 2022 en Perú.
En Argentina los primeros casos en aves fueron en febrero de 2023 en el área natural Lagunas de Pozuelos, en la provincia de Jujuy.
“Por su gran versatilidad y capacidad adaptativa, la influenza adquirió muchos subtipos. La variante H5N1 fue detectada en aves en 1996 por primera vez y tuvo la particularidad de sostenerse mucho en el tiempo y empezar a incorporar cambios genéticos y diseminarse por el mundo a partir de grandes oleadas”, precisó Ariel Vagnozzi, veterinario especialista en virus aviares.
“Son virus que tienen la capacidad de dañar severamente a los animales, puede llegar a casi el 100% de mortalidad, lo que supone una amenaza muy grande para la producción agrícola”, añadió el experto, responsable del Laboratorio de aves del Instituto de Virología del INTA.
Si bien su transmisión de aves a mamíferos supone un posible “mayor riesgo de contagio” al humano, los especialistas coincidieron en que es “infrecuente”.