Los fuertes vientos que se desataron anoche en la capital pampeana y sus alrededores provocaron varios daños y todavía hay zonas donde persisten los cortes de luz. Alcanzaron los 85 kilómetros por hora, según confirmaron desde el Servicio Meteorológico Nacional.
Hasta pasadas las 8:00 horas los lugares que estaban sin energía eran Villa Tomás Mason Norte, Villa Tomás Mason Sur, Villa del Busto, Zona Rural, zona rural Colonia Lagos y zona rural Winifreda, según confirmaron desde la Cooperativa Popular de Electricidad.
Las fuertísimas ráfagas derribaron columnas de alumbrados, árboles, plantas e incluso provocaron daños en varios tapiales en diferentes puntos de la ciudad y en los barrios más periféricos de la ciudad.
La particularidad que tuvo en esta ocasión el viento es que no provino en forma directa de una tormenta, la que pasó un rato antes y descargó muy pocos milímetros.
«Afectó como dos franjas de la ciudad, la zona norte, cruzando la Pilcomayo, atrás del hospital y todo lo que es el barrio Lowo Che para arriba», precisaron desde la CPE.
«No hubo un corte generalizado, sino cortes puntuales en diferentes zonas… se fueron reponiendo las líneas antes de volver a conectar por eso es que a veces el regreso del servicio se demora un poco», precisaron ante una consulta de El Diario.
La policía y los bomberos también tuvieron una noche «movidita» y como consecuencia de los fuertes vientos concurrieron a diferentes presencias.
– Una de ella fue a las 23:00 horas por árboles caídos frente al tiro Federal y en la vera de la Ruta 35, frente al predio del Club Deportivo Mac Allister. En ambos casos tuvieron que pedir la colaboración de los bomberos.
– A esa misma hora, a las 23:00 horas, mientras despejaban la Ruta 35 por la caída de árboles, observaron un vehículo en la colectora y dentro de una zanja de desagüe. Se trataba de un Renault 12, que venía desde General Pico. «Se encontraron con un árbol en la ruta y al hacer una maniobra para esquivarlo, terminaron en el desagüe», confió una fuente policial.
– Unos 10 minutos después, los uniformados tuvieron que concurrir a la calle Pueyrredón al 1262 por otro árbol caído. Y desde ahí la misma patrulla se movió hasta la calle Santiago Álvarez, entre Trenel y Bernasconi, por otros tres árboles caídos. En ambos casos -con el uso de motosierras- trozaron las plantas y despejaron la zona.
– Una situación similar se vivió sobre la calle La Riosa 393, con la caída de árbol que obstruyó un garage, y en a avenida San Martín frente a Casa de Gobierno.
– También ocurrió lo mismo sobre la calle Tierno, entre Luro y Garay Vivas y en la esquina de Urquiza y Mansilla, dónde también había un cartel caído de una librería.
– Sobre la calle Suipacha 621 se produjo una de las situaciones más graves: voló el techo de una casa y las chapas quedaron colgadas del tendido eléctrico.
– La plaza de Los Caldenes, sobre la avenida Uruguay, también sufrió el daño de uno de los caldenes más añejos de la ciudad. La amarra de metal con la que estaba protegido uno de los gajos más gruesos no aguantó, se partió al medio y cayó cerca de la casa vecina.
Fuente: El Diario
