La Organización Panamericana de la Salud puso como ejemplo al Hospital de Jacinto Arauz e hizo un reconocimiento al Gobierno de La Pampa

Promocionando la importancia de la vacunación, el organismo resaltó la creatividad y eficacia del abordaje emocional para vencer la reticencia a vacunarse, que fue implementado en el hospital “Juan Munuce”. También reconoció a la determinación de los Gobiernos, en este caso el pampeano, “por garantizar que las poblaciones gocen de un futuro saludable”.

En el marco de la Semana de la Vacunación de las Américas, que se desarrollará entre el 20 y el 27 de abril próximos, la Organización Panamericana de la Salud (OPS) mostró como ejemplo al hospital público de Jacinto Arauz en su página web y hace un reconocimiento a la determinación de los Gobiernos, en este caso el de la provincia de La Pampa, “por garantizar que las poblaciones gocen de un futuro saludable”.
Se trata del Hospital “Juan Munuce”, de Jacinto Arauz, donde se implementó un abordaje emocional de la vacunación, que está logrando excelentes resultados .
Después de concurrir a una escuela primaria para vacunar a los niños, hace un año, los profesionales de ese centro sanitario empezaron a buscar soluciones para la reticencia de chicos y adultos a efectuarse las inmunizaciones de cada caso.
“Identificamos que el miedo y la inseguridad son las principales barreras a vencer para que los niños y los mayores se den las vacunas como corresponde”, afirma Laura Kapustiansky, encargada del sector vacunación de ese Establecimiento de salud pampeano, que se encuentra en el centro de la escena desde que la Organización Panamericana de la Salud publicó un video sobre sus logros y contó la historia en su página oficial.

Vencer el “miedo al dolor”
En diálogo con la Agencia Provincial de Noticias la profesional destacó que “el miedo al dolor y a las agujas puede afectar a los niños a medida que crecen e interferir en los cuidados preventivos. En los adultos, además, la angustia a los efectos adversos es una barrera para vacunarse. A partir de ello surgió este proyecto que estimula a las personas que van a vacunarse a expresar lo que sienten, a través de los muñecos de felpa que llamamos “monstruos de las emociones”, y representan la alegría, el miedo, el enojo, la tristeza, la calma, la confusión, entre otras”, explicó.
El abordaje desde el plano emocional “permite acompañar, emplear técnicas adecuadas para una buena gestión de las emociones y reducir las molestias de posibles efectos secundarios leves”, asegura la profesional.
Las técnicas consisten en “controlar la respiración, abrazar a mamá, entender que llorar no está mal y expresar lo que estamos sintiendo”, dice Laura, que agrega: “Del otro lado, nuestro compromiso es escuchar activamente lo que nos relatan y actuar en consecuencia”.
Los resultados en un año de trabajo con esta metodología son excelentes. “Notamos que tanto niños como adultos logran vencer las barreras emocionales y la vacunación deja de ser traumática. Muchos chicos ya incorporaron el hábito de llegar y tomar el muñeco que los identifica con la emoción que están sintiendo”, reveló la profesional.
La OPS, por su parte, destaca que “los países de la región de las Américas trabajaron fuertemente durante los últimos años para recuperar las tasas de coberturas para todas las vacunas”. Como ejemplo de estrategias (de vacunación) exitosas, el organismo cita el abordaje emocional implementado en Jacinto Arauz, elogiando su creatividad y eficacia.
En ese contexto, marca también que es un reconocimiento a la determinación de los Gobiernos, en este caso particular a la gestión que encabeza el gobernador Sergio Ziliotto, “por garantizar que las poblaciones gocen de un futuro saludable”.
La OPS compartió estas experiencias como punto de partida para impulsar la colaboración y el aprendizaje entre países y que los esfuerzos por proteger a las comunidades de enfermedades prevenibles por la vacunación continúen.