A los fuertes recortes en materia presupuestaria que sufrieron las áreas de derechos humanos desde que asumió el actual Gobierno y a los despidos de agentes estatales ocurridos en los últimos días, se suma ahora la pretensión de quitarle a la CONADI la facultad de conducir investigaciones y de acceder a los archivos en poder del Estado, además de desplazar a su actual dirección.
Por ese motivo, este jueves 4 de julio, Abuelas de Plaza de Mayo concretó una nueva ronda en la Plaza de Mayo para preservar el organismo que se encarga de localizar y restituir su identidad a los bebés que fueron apropiados, hoy hombres y mujeres que rondan los 45 años.
Este desmantelamiento a las áreas, y a las políticas públicas de derechos humanos, no solo es un retroceso en la materia a nivel nacional sino también para La Pampa, dado que todavía se busca a los/las hijos/as apropiados/as de dos pampeanos, el de Carlos Orzaocoa (cuya pareja fue secuestrada en Córdoba en 1975) y el de Ana María Gutiérrez (desaparecida en Buenos Aires en 1976).