
El cacique Demetrio Campos, de la comunidad Misión Wichí, alertó sobre la gravedad del escenario: «Piden alimentos. Rivadavia Banda Sur está siendo inundada». Según Campos, esta es la segunda crecida del río en poco tiempo, y su impacto está dejando a las comunidades en una situación de abandono: «La naturaleza también hace eso, pero lamentablemente las comunidades están siendo abandonadas por los gobiernos, tanto nacional, provincial, municipal».
La crisis alimentaria afecta a niños, mujeres embarazadas y ancianos, quienes no cuentan con recursos suficientes para subsistir. «Duele ver a los hermanos sufrir así, que nadie los asista. Sobre todo los niños, mujeres embarazadas, ancianos, ancianas, son los que están sufriendo en ese lugar aislado», expresó con pesar el cacique Campos.
Las condiciones son extremas. Algunos jóvenes han tenido que abandonar sus comunidades nadando o en motocicletas para buscar ayuda, enfrentando las inclemencias del clima y las inundaciones. «Es imposible salir. Toda esta semana fue una semana de mucha lluvia y son kilómetros de aguas que tienen que transitar los que pueden salir al pueblo y no hay asistencia», detalló Campos.

Ante esta situación, el líder comunitario hace un llamado urgente a la solidaridad: «Nosotros, como originarios, solicitamos al pueblo en general que puedan donar mercadería, pañales, leche, porque las familias, los niños están sufriendo hambre».
Por su parte, el interventor del municipio de Morillo en Rivadavia Banda Norte, Marcelo Córdoba, anunció que en los próximos días se planifica asistencia aérea para las comunidades aisladas, en un intento por aliviar la situación de los afectados.