El fallo establece que la condenada deberá fijar domicilio y someterse al control del Ente de Políticas Socializadoras y la Unidad de Abordaje Supervisión y Orientación para personas en conflicto con la Ley Penal. Además, se le ordena un tratamiento psicológico, todo ello como parte de su reinserción social.
El hecho que motivó la condena ocurrió el 18 de octubre de 2023, cuando la mujer agredió a su hijo de 12 años, golpeándolo con una manguera en varias partes del cuerpo, lo que le causó lesiones de carácter leve. Durante el juicio oral, realizado el 21 de marzo de 2025, se presentó como prueba que la agresión fue un incidente aislado, sin antecedentes previos de maltrato hacia los niños.
El fiscal Guillermo Komarofky había solicitado una condena de ocho meses de prisión de ejecución condicional y la aplicación de reglas de conducta, mientras que la defensa solicitó la suspensión del proceso a prueba por un año, lo que fue rechazado por la jueza debido a que dicha solicitud fue presentada fuera de término.

En su declaración, la acusada reconoció el hecho, pero negó que hubiera maltratado habitualmente a sus hijos, lo cual fue corroborado por el testimonio de la abuela paterna de los niños y los profesionales intervinientes en el caso, quienes confirmaron que nunca antes ni después se había dado una situación similar.
En su resolución, la jueza Gianinetto destacó la certeza de que el hecho ocurrió tal como fue relatado, pero aclaró que no se trató de una conducta habitual, sino de un hecho aislado. Asimismo, rechazó la solicitud de suspensión del proceso a prueba, argumentando que fue presentada fuera del plazo correspondiente.
Con información de La Arena