El feroz animal no solo acabó con la vida de Cortez, sino también con la de sus cuatro perros. La víctima luchó por su vida durante dos semanas en el Hospital Central, pero las graves heridas sufridas, que incluyeron la sección de tres tendones y dos arterias en su brazo izquierdo, resultaron fatales.
El ataque mortal
El episodio tuvo lugar cuando los perros de Cortez hallaron al jabalí escondido entre la vegetación. Según contó su hermano Claudio, el animal ya estaba herido y reaccionó agresivamente al sentirse acorralado. «Los perros comenzaron a ladrar y el chancho atacó. Luego de matar a los perros, mi hermano resbaló en el lodo y el jabalí lo atacó brutalmente en el suelo», relató.
Al día siguiente, el jabalí fue hallado muerto con un disparo en la zona de las costillas, lo que refuerza la teoría de que el animal había sido previamente herido y actuó en defensa propia.
Una lucha desigual por sobrevivir
Tras el violento ataque, los acompañantes de Cortez lograron trasladarlo a pie hasta uno de los puestos cercanos. Fue entonces cuando un vecino que pasaba por la zona les brindó auxilio, transportándolos en camioneta hasta el hospital Paroissien en Maipú. Desde allí, fue derivado de urgencia a un centro de mayor complejidad.
A pesar de los intensos esfuerzos de los médicos, Diego Iván Cortez no pudo recuperarse y falleció este sábado, dejando un profundo dolor en su familia y la comunidad.
Despedida con dolor y amor
Sus seres queridos lo despidieron con un emotivo mensaje: «Nos quisiste con tanta fuerza y bondad que tu amor estará por siempre grabado en nuestra alma, te amamos viejito». Su esposa, Virina Albornoz, y sus hijos Rocío, Malcom y Julieta lo recordaron con amor y tristeza.
El trágico desenlace de esta historia deja un fuerte impacto en la comunidad rural, donde los encuentros con jabalíes, aunque no infrecuentes, rara vez terminan en una tragedia de tal magnitud.
