
El presidente del Control de Ingreso Provincial de Productos Alimentarios (Cippa), Andrés Piotti, confirmó la noticia y advirtió sobre los riesgos sanitarios que implicaba esta mercadería. «Era carne vencida», aseguró, exhortando a la población a comprar únicamente en comercios habilitados para evitar problemas de salud. «Este ingreso de mercadería es un atentado a la salud pública, directamente», enfatizó.
Dos procedimientos clave
El primer operativo se realizó pasada la 1 de la madrugada en una ruta provincial cercana a Rincón de los Sauces, donde se detuvo una camioneta Toyota Hilux proveniente de Alvear, Mendoza, con destino a Neuquén. Al inspeccionar el vehículo, los agentes encontraron 580 kilos de carne sin la habilitación sanitaria correspondiente, incluyendo cortes sin hueso y 29 costillares de asado.
El segundo procedimiento resultó aún más alarmante. Al interceptar un camión Ford Cargo, los inspectores descubrieron que transportaba más de 3.600 kilos de carne. Según informó Piotti, la mercadería había superado el plazo de consumo recomendado de diez días tras la faena, alcanzando los quince días de antigüedad, lo que la convertía en un producto no apto para el consumo humano.

Las personas involucradas en el traslado eran particulares, aunque uno de ellos contaba con licencia del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) para el transporte de alimentos. A pesar de esto, al incumplir las normas sanitarias, se le aplicará una multa considerable.
Destino de la carne decomisada
Tras el decomiso, la carne incautada fue trasladada al basurero de Rincón de los Sauces, donde se procedió a su destrucción mediante entierro y cobertura con cal para acelerar su degradación.
Las autoridades reiteraron la importancia de los controles para garantizar la seguridad alimentaria de la población y evitar que productos en condiciones inadecuadas lleguen a los comercios y consumidores de la región.