El pasado 9 de julio, las calles céntricas de Eduardo Castex se vistieron de celeste y blanco para celebrar la independencia. Pero también vibraron con el paso de los corredores que participaron en la segunda edición de la Carrera del Día de la Independencia, organizada por la Dirección de Deportes de la Municipalidad local. Entre ellos, uno dejó una huella especial: Kevin Bongiovanni.
El runner castense subió al podio tras conseguir el segundo puesto en los 5K, pero lo suyo trascendió el resultado. Ese día, Kevin corrió con el alma y con una promesa a cuestas, en homenaje a su amigo y referente: Luis “Palito” Sánchez.
“Antes iba en la moto marcando el circuito… ahora voy corriendo”, dijo Kevin con la voz cargada de emoción, recordando aquellos días en los que compartían el detrás de escena de cada evento deportivo. Pero esta vez, Palito estuvo presente de otra forma: en el pantalón naranja número 5 que Kevin lució con orgullo, un símbolo de amistad, recuerdo y gratitud.
La historia detrás del atuendo emociona. Aquel pantalón pertenecía a Palito. Fue un regalo sorpresa que Kevin recibió para su cumpleaños, tras una emotiva cadena de afectos que incluyó a su pareja Ana, y a familiares de Luis «Palito» Sánchez. El pantalón llegó con una condición clara: debía ser usado en una carrera en Castex, y Kevin cumplió la promesa en esta fecha tan significativa.
Palito, hizo historia en Castex
Luis “Palito” Sánchez llegó desde Buenos Aires a Eduardo Castex para jugar en Racing Club, y con el tiempo también defendió los colores del Club Estudiantil. Pero su legado fue más allá de la cancha. Fue el fundador del tercer club del pueblo: Nativos Fútbol Club, una institución que marcó una época.
El 9 de marzo del año 2000, junto a un grupo de soñadores y con el corazón puesto en el Barrio Calandri, Palito dio forma a un nuevo club para Castex. Eligió como símbolo al hornero, ícono de humildad y esfuerzo, y vistió al equipo de naranja, el color de la bandera local. Así nació Nativos Fútbol Club, con su estadio propio en la esquina de Avenida Independencia y Combate San Lorenzo, y con participación oficial en la Liga Pampeana de Fútbol.
Palito fue todo en ese club: jugador, técnico, masajista, utilero, canchero, y mucho más. Cada castense que vivió esa etapa lo recuerda como el alma de una institución que hoy es parte del patrimonio afectivo y deportivo del pueblo.
Kevin no solo corrió por él. Corrió con él. Y con esa camiseta y ese pantalón, Nativos volvió a caminar nuestras calles.
