
Aunque el tren ya había dejado de circular en marzo de 2023, fue en julio de este año cuando se resolvió cerrar en forma permanente la estación Bahía Blanca Sud, descartando cualquier posibilidad de reactivación.
El cierre se enmarca en la Emergencia Ferroviaria que atraviesa el país, tras el desmantelamiento del sistema ferroviario anunciado por el Gobierno nacional a mediados de 2024. La situación se agravó con el descarrilamiento de una formación Tucumán–Buenos Aires ocurrido en septiembre en Santiago del Estero.
En marzo pasado se cumplieron dos años de la suspensión del servicio de pasajeros entre Constitución (Buenos Aires) y Bahía Blanca, con paso intermedio por Olavarría. Este último municipio fue el único que reclamó oficialmente ante Trenes Argentinos Operaciones (SOFSE) la restitución del servicio.

Fuente histórica de trabajo
El cierre del ramal no solo significó el fin de una conexión ferroviaria histórica hacia el sur bonaerense, sino también la pérdida de empleos: 17 trabajadores quedaron sin sus puestos, muchos de ellos con décadas de trayectoria en el sistema.
La medida no será la última
También se anunció la clausura definitiva de las estaciones Daireaux y Balsa (Lincoln), mientras que más de 50.000 metros cuadrados pertenecientes a la estación Barrow (Tres Arroyos) fueron desafectados del uso ferroviario y transferidos a la Agencia de Administración de Bienes del Estado (AABE) para su futura venta.
Incertidumbre
Mientras tanto, persiste la incertidumbre sobre el futuro de otros ramales, en un contexto en el que Argentina sigue perdiendo los trenes que alguna vez impulsaron su desarrollo y conexión territorial. (InfoGEI)Ac