CAME considera que esta decisión del Gobierno nacional es fundamental para ordenar el esquema de pagos de los privados y para dar certidumbre al mundo. A su vez, destaca que el foco esté puesto en el sector industrial, ya que es donde más se necesita sostener el flujo de bienes para la producción y el nivel de actividad de las pymes.
De esta manera, a partir de hoy se les permitirá a los importadores con deudas registradas hasta el 13/12/2023 −no mayores a US$ 500.000 y declaradas en el padrón− que inicien el pago a sus proveedores. El esquema respetará el siguiente orden: la primera cuota será de hasta US$ 50.000; la segunda será de otros US$ 100.000 −desde el 10 de marzo próximo−; mientras que la última cuota será por el resto de lo adeudado −a partir del 10 de abril del corriente.