Estaba por terminar el 2023 y Emilia tenía la mejor sorpresa para sus fans. Con la presentación de su disco .mp3 se venía una gira que prometía, y mucho. La conocí en una entrevista exclusiva para Noticias Argentinas, todavía no podía contar sobre su show, pero se mordía los labios por poder adelantar algo. Ella sonreía y la sala se iluminaba. Su belleza no dejaba de sorprenderme porque se notaba su dedicación y su esfuerzo por estar hasta en el más mínimo detalle como sus brillos en los ojos que esta vez venían con forma de estrellas porque, como contó, quería seguir sorprendiendo con cosas nuevas a su público. Su maquillaje, su vestuario y su presencia ya le daban ese aire de estrella, que después confirmaría al subirse al escenario.
Por eso se arriesgó, probó seguir su instinto y decidió homenajear a aquellos cantantes que la inspiraron: hizo un álbum con melodías y referencias de los 2000 y después prometió dar un show inolvidable. Solo bastaron 10 horas para que Emilia llenara 10 Movistar Arena. Entonces, decidida y pisando aún más fuerte, fue por más y puso dos fechas para el Estadio Vélez Sarsfield los días 12 y 13 de octubre.
Tuve la oportunidad de presenciar el segundo de los 10 shows previstos para el Movistar Arena. Llevé a mis hijas y me vestí a tono. Hasta tapé mis ojeras con los famosos brillitos bajo los ojos y decidí entregarme a la experiencia de la chica del momento. El primer recital había dejado la vara altísima. Por lo que había visto en redes sociales no había faltado nada: plataforma voladora, cambios de look, coreografías, pantallas interactivas con videojuego en el que desbloqueaba niveles e invitados de lujo.
Llegamos puntuales y realmente estábamos a tono. El público era muy familiar y tranquilo, madres con sus hijas muy pequeñas o grupos de chicas muy jóvenes era lo que más había en las tribunas. Ese es el público que ama y sigue a Emilia, copian su estilo, la admiran y bailan sus coreos.
Llegó el momento de demostrar qué tenía para dar. Solo pasaron 5 minutos de las 21 horas (las madres agradecidas por la puntualidad) y salió desde una estrella gigante otra estrella aún más grande: era Emilia, vestida de rosa con un estilo que se usó mucho dos décadas atrás cuando ella comenzaba a enamorarse de la música en su humilde casa de Nogoyá, Entre Ríos.
Lo que vimos en las siguientes dos horas fue un show internacional, con un despliegue pocas veces visto en donde hubo hasta un escenario en el que parecía estar volando por sobre su público. Los looks llenos de color, de brillos, por supuesto, y con un estilo muy marcado. Propuso en su show un viaje de regreso a los inolvidables sonidos de los años 2000, una cápsula del tiempo musical donde reunió de manera impecable pop, R&B, dance y hip-hop con ritmos modernos, logrando una fusión perfecta. Los ya clásicos de su repertorio se intercalaban con los flamantes grandes éxitos virales de “.mp3”. Era como ver a Britney Spears en su época dorada.
Sintiéndose “poderosa con los ojitos verdes” se subió a una plataforma y pasando por arriba de su público se dedicó a mirar a todos y a agradecer por el sueño que estaba cumpliendo al hacer un show de esta magnitud. También saludó a toda su familia que vino desde Nogoyá y que cerró la panadería para poder estar acompañándola, solo minutos después del momento más icónico del show donde se consagraba como toda una Reina del Pop, ella bajaba a la tierra y recordaba sus orígenes. Sus padres aparecieron en cámara en uno de los momentos más emotivos de la noche cuando Emilia le dedicó el tema “Guerrero” a su papá y se emocionó hasta las lágrimas.
Un fragmento del show lo hizo desde un escenario más pequeño, ubicado en la otra punta del recinto donde se la podía ver desde todos lados y ella podía estar más cerca del público, al que agradeció por haber hecho el “esfuerzo tan grande por comprar una entrada”.
El momento más romántico llegó en el tema “Como si no importara”, que tuvo a su novio, Duki, otro ícono de los jóvenes. Comenzaron al estilo “Romeo y Julieta”, ella cantando desde un balcón y después él la seguió en esas caminatas que solo ella sabe hacer con una pisada escénica fuertísima. Besos, abrazos y un público deseando vivir una historia de amor así.
Esta segunda noche no tuvo más visitas (en la primera además de Duki estuvieron Nicki Nicole, Tiago PZK, FMK y Callejero Fino), tampoco fue necesario que las tuviera. Su presencia y la de sus músicos y bailarines, junto a las pantallas, las luces y los diferentes escenarios, marcaron un show perfecto, redondo y bien planificado en cada detalle.
Sonaron “Exclusive”, “Facts.mp3, “Cuatro veinte”, “Jagger.mp3″ y el clima de fiesta hacía vibrar un Movistar Arena repleto por 12 mil personas que cantaron con ella cada uno de sus temas. Con “La original.mp3” recordó que la escribió con su amiga Tini Stoessel y deseó que todos puedan mostrar su versión original.
Este show fue el segundo de los 10 que tiene previstos realizar en el Movistar Arena y que logró llenar en sólo 10 horas, batiendo todos los récords. Con producción de Fenix Entertainment, los próximos recitales de Emilia serán los días 19, 20, 21 y 23 de abril y 3, 29, 30 y 31 de mayo. Pero por la gran demanda del público y luego de visitar otras provincias de la Argentina y países de Latinoamérica y Europa, regresará a Buenos Aires para ofrecer dos shows en el Estado Vélez Sarsfield los días 12 y 13 de octubre.
¡Emilia llegó para quedarse! Y ver su show en vivo es una experiencia que vale la pena vivir.