
Durante este período de duelo, las banderas en los edificios públicos de la ciudad permanecerán izadas a media asta como símbolo de respeto y recogimiento.
“Francisco fue un líder que trascendió los límites de la Iglesia para convertirse en una voz moral del mundo, promoviendo la paz, la justicia social, el cuidado del ambiente y la fraternidad entre los pueblos”, señalaron desde el municipio.
El decreto municipal destaca el legado del primer Papa latinoamericano, quien con su palabra y ejemplo acompañó a millones de personas en todo el planeta, promoviendo valores universales que marcaron su pontificado.

La decisión del intendente se suma a los múltiples homenajes y gestos de reconocimiento que se replican en todo el país y el mundo, en honor a quien fuera una de las figuras más influyentes de la Iglesia Católica en los últimos tiempos.