
El castense Juan Carlos Miranda, excombatiente y sobreviviente del ataque, compartió su testimonio con profundo respeto por sus compañeros caídos. “En esta fecha tan especial, mi recuerdo es permanente en honor a los 323 héroes que quedaron en el crucero custodiando nuestro mar argentino. Mis respetos hacia ellos”, manifestó. “Honrémoslos hoy en todos los actos que se hacen en todo el país”, agregó con emoción.
El ataque al ARA General Belgrano ocurrió el 2 de mayo de 1982, mientras el buque se encontraba a 35 millas al sur de la zona de exclusión establecida por el Reino Unido alrededor de las Islas Malvinas. La ofensiva, que generó polémica internacional por su ubicación fuera del área de conflicto, marcó un punto de inflexión en el conflicto bélico.

El crucero argentino había zarpado desde la Base Naval de Puerto Belgrano el 16 de abril de 1982 con la misión de interceptar y atacar a las fuerzas británicas que se dirigían al archipiélago. Tras el impacto de dos torpedos, el buque se hundió a unas 240 millas náuticas al sureste de Ushuaia, en plena tormenta y con temperaturas bajo cero. Los sobrevivientes resistieron durante horas en balsas inflables hasta que fueron rescatados.


Cada año, el hundimiento del Belgrano es recordado como símbolo de entrega, valor y sacrificio. A 43 años de aquella tragedia, la memoria de los 323 marinos caídos sigue viva en el corazón del pueblo argentino, como un legado imborrable de la defensa de la soberanía nacional.