
Todo se desató con la irrupción del intendente capitalino Luciano di Nápoli, que generó cánticos enfrentados, insultos a Carlos Verna y el posterior retiro de buena parte de la dirigencia provincial. En ese contexto, Ziliotto optó por encabezar el acto dentro del salón —y no en la vereda o desde una ventana, como se había barajado— para dar una imagen de unidad, aunque frágil, sobre el escenario.
“Festejamos un nuevo triunfo peronista, le guste a quien le guste, le pese a quien le pese”, comenzó el mandatario y presidente del PJ pampeano, decidido a jerarquizar el resultado electoral por encima de las disputas internas. “Una vez más, el peronismo tendrá la mayoría representando al pueblo argentino en la Cámara de Diputados”, destacó.
“La Pampa es el bastión de la justicia social”
Ziliotto defendió el modelo provincial frente a las políticas nacionales de ajuste. “La Pampa es el bastión de la justicia social en la Argentina, no se la llevó puesta la ola violeta”, aseguró, marcando la diferencia entre “dos modelos de mirar a la gente: uno que expulsa y otro que abriga, como el peronismo”.

En el tramo más duro del discurso, el gobernador pidió dejar atrás los personalismos y retomar la doctrina justicialista. “Toda la dirigencia de La Pampa tiene que entender que es momento de defender a los que menos tienen y de dejar apetencias personales”, subrayó, en clara alusión al conflicto que había estallado minutos antes. Sin nombrarlo, cuestionó también a Carlos Verna, que horas antes había reavivado las internas en una conferencia de prensa.
“Primero la patria, después el movimiento y tercero los hombres”, recordó Ziliotto, mientras debajo del escenario continuaban los cánticos cruzados.
Un mandato popular para seguir peleando
El mandatario provincial interpretó el resultado electoral como una ratificación del rumbo de su gestión: “En el Congreso tenemos una mano más para seguir peleando por La Pampa”.
“Las urnas dieron un mandato a nivel nacional, y La Pampa dio un mensaje contra el modelo del ajuste y el endeudamiento. Seguiremos de la misma manera, estando cerca de los pampeanos, de los intendentes; ninguno debe quedar atrás”, sostuvo.
Ziliotto cerró su discurso con un mensaje de identidad peronista: “Vayan tranquilos hoy a sus casas, demostramos que La Pampa nació peronista, es peronista y seguirá siendo peronista”.
“Lichi” Marín y un recuerdo familiar
Antes, la diputada electa Varinia “Lichi” Marín agradeció “a la militancia y a toda la dirigencia que entendió lo que estaba en juego”, y dedicó el triunfo a su padre, el exgobernador Rubén Marín: “Mi sostén infinito, el recuerdo vivo de mi conductor. Hoy estaría más feliz que yo por recuperar una banca para La Pampa”.
La noche cerró con el justicialismo pampeano celebrando una nueva victoria electoral, aunque también con el desafío inmediato de recomponer su unidad. La tregua impuesta por Ziliotto bajo la consigna de “defender a La Pampa” será, desde hoy, la prueba más difícil del peronismo provincial.
Con información de El Diario

















