El fallo se dictó en el marco de un juicio abreviado, luego de que el acusado Kevin Ezequiel Bermúdez reconociera su participación en los delitos.
Varios hechos comprobados
De acuerdo con la investigación encabezada por la fiscal Marina Lara, del Departamento Judicial de Bahía Blanca, Bermúdez fue encontrado responsable de cuatro casos de abigeato agravado, dos de abigeato simple, un hurto y malos tratos a los animales.
Los hechos ocurrieron entre noviembre de 2023 y agosto de 2024 y afectaron a varios productores rurales de las zonas de Ombucta, Villarino, Colonia El Fortín, Pedro Luro y Teniente Origone.
En una de las causas, fechada el 15 de mayo de 2024, el imputado sustrajo 23 lechones y diversos elementos de un establecimiento rural, trasladándolos luego en una camioneta Ford F-100 por la Ruta Nacional 3.
Otro episodio documentado ocurrió entre el 31 de noviembre y el 1 de diciembre de 2023, cuando Bermúdez y sus cómplices robaron 12 corderos de un campo sin nombre ubicado en Villarino.
Posteriormente, entre el 26 y el 27 de diciembre del mismo año, ingresaron nuevamente a un predio rural en Ombucta y se llevaron 13 corderos y tres lechones.
Reiteración delictiva
La secuencia delictiva continuó en 2024. Entre el 12 y el 13 de junio, Bermúdez y otras personas aún no identificadas sustrajeron dos terneros de unos 200 kilos de un campo en Colonia El Fortín, en la zona rural de Pedro Luro.
Días después, entre el 26 y el 27 de junio, regresaron al mismo establecimiento y se apoderaron de siete vacunos, tras cortar un alambre del tranquerón de acceso.
Finalmente, el 18 de julio de 2024, el acusado robó un ternero Aberdeen Angus colorado de unos 170 kilos del campo “La Vizcaína”, en Teniente Origone. El animal fue faenado y transportado en su camioneta hasta Mayor Buratovich.
Maltrato animal
Además de los robos, Bermúdez fue procesado por malos tratos a un perro de raza dogo hallado en su domicilio durante un allanamiento realizado el 16 de agosto de 2024.
El animal estaba atado al paragolpe de una camioneta, en estado de desnutrición y con sarna avanzada, según constató un médico veterinario.
La condena a cuatro años y medio de prisión cierra una extensa investigación por una seguidilla de delitos rurales que afectaron gravemente a la región de Villarino.
