
El denunciante, relató que conoció a la trabajadora el pasado 31 de octubre, cuando acudió al hospital para gestionar un turno. Según su testimonio, la mujer obtuvo su número telefónico durante la atención y luego lo contactó vía WhatsApp.
En esos mensajes —siempre de acuerdo a la declaración del damnificado— la empleada habría manifestado atravesar una situación crítica vinculada a la salud de su hijo, presuntamente internado en Bahía Blanca. También le habría dicho que se encontraba en la calle sin recursos, solicitando colaboración económica de manera urgente.
El denunciante afirmó que, confiando en la versión recibida, realizó cinco transferencias bancarias que totalizaron 5,5 millones de pesos. Para completar el monto, indicó que incluso recurrió a préstamos otorgados por familiares y allegados. Aseguró también contar con todos los comprobantes de esas operaciones.

El conflicto se agravó cuando, pese a la promesa de devolución mediante cheques o transferencias durante la semana siguiente, la empleada no cumplió con lo pactado y el 6 de noviembre volvió a pedirle más dinero. En ese momento, el vecino decidió formalizar la denuncia.
La confianza inicial se quebró definitivamente cuando el damnificado conversó con conocidos de General Acha, quienes le advirtieron que la mujer ya habría protagonizado situaciones similares.
Según trascendió, la trabajadora denunciada habría sido separada de sus funciones en el Hospital Padre Buodo mientras avanza la investigación. Las actuaciones judiciales se encuentran en trámite en la Comisaría de Guatraché.














