Para el viernes se espera un cambio en las condiciones, con probabilidad de chubascos débiles y un leve descenso en la temperatura. La máxima rondaría los 32 °C y la mínima estaría cerca de los 19 °C, mientras el cielo permanecerá parcialmente nublado durante buena parte del día.
El sábado llegará con cielo cubierto y la presencia de lluvias débiles. Las temperaturas serán más frescas que en jornadas anteriores, con una máxima estimada en 23 °C y una mínima en torno a los 18 °C. La inestabilidad comenzará a consolidarse hacia la tarde y la noche.
El domingo se prevé la condición más inestable del fin de semana, con tormentas y precipitaciones de mayor intensidad. Las lluvias podrían desarrollarse desde horas de la mañana y acumular un volumen significativo. La máxima apenas alcanzaría los 23 °C y la mínima se ubicaría cerca de los 16 °C.
Este escenario representa un marcado contraste respecto del calor intenso registrado en los últimos días. Las precipitaciones anunciadas podrían aportar alivio térmico y resultar favorables para actividades agropecuarias, aunque se recomienda a la comunidad mantenerse atenta a la evolución del tiempo durante el fin de semana.
