El pasado sábado, agentes de la Dirección General de Inspecciones realizaron una inspección en el lugar y, tras constatar múltiples infracciones a la normativa de seguridad laboral, ordenaron la suspensión inmediata de los trabajos. Sin embargo, este lunes 15, una nueva alerta advirtió que las tareas continuaban sin las condiciones mínimas de seguridad, con operarios trabajando a más de ocho metros de altura sin protección adecuada.
Frente a esta situación, personal de inspección regresó al sitio y comprobó que las condiciones de riesgo se mantenían. El director de Inspección, Gerardo Salvadori, manifestó su preocupación:
«No observamos interés por parte de las empresas ni de la obra en general en acatar la suspensión ni en acondicionar las medidas de seguridad. El sábado detectamos elementos de protección absolutamente precarios o inexistentes, personas sobre vigas sin aseguramiento, cascos mal colocados y carros elevadores sin resguardo.»
Además, Salvadori señaló la falta de capacitación de los trabajadores y la ausencia de un responsable de seguridad en altura, figura exigida desde hace más de un año por la Resolución 61.
“Incluso con el inspector presente y la orden de suspensión vigente, las tareas continuaban. Una viga cayó desde ocho metros y cortó un cable eléctrico, lo que pudo haber terminado en tragedia.”
Desde la Secretaría de Trabajo calificaron la situación como “un grave descontrol” y advirtieron que la obra evidencia falta de coordinación entre las empresas participantes, lo que agrava el riesgo para los operarios.
El organismo reafirmó su compromiso con la seguridad laboral y anticipó que aplicará las sanciones correspondientes por los incumplimientos detectados. La intervención continuará para garantizar el cumplimiento efectivo de la normativa vigente.
